Previsiones de más de 26.000 espacios de coworking en todo el mundo en 2020
El crecimiento de este tipo de espacios deja entrever que habrá más del doble para dentro de 3 años
El siglo XXI es el siglo de la transformación. Así, los pequeños movimientos pueden llegar a convertirse en grandes revoluciones en diferentes campos. Algo similar tiene pinta de ocurrir con los entornos de trabajo colaborativos.
Los centros de coworking en Barcelona, en Madrid, en Londres, en Nueva York o en multitud de puntos en todo el planeta están disfrutando de un despegue sin precedentes. Todo empezó con un pequeño movimiento, un grupo de personas que deseaban trabajar de forma independiente pero formando parte de una comunidad.
Un sofá y un ordenador sobre las rodillas como lugar de trabajo. O una silla y la mesa del salón. Si hay suerte, se coge una habitación libre, se apartan los trastos y se convierte en oficina. Esta es la realidad de cada vez más profesionales en España, obligados a trabajar desde casa. Primero, porque las empresas tienden a ahorrar costes externalizando servicios que antes se prestaban a nivel interno. Y luego, porque los miles de autónomos que antes de la crisis alquilaban oficinas privadas o espacios compartidos hoy no pueden permitírselo. Toca, pues, pasarse la semana encerrado en casa. Y el sentir mayoritario es claro: puede llegar a ser insufrible.
Spain is really great for remote working: good weather, good food, amazing public transport, a lot of good coworking spaces, and we even have a Google Campus right in the city center of Madrid.
La tradicional postal, casi fotográfica, que retrataba las típicas oficinas de las empresas, en las que todos los colaboradores trabajaban de manera automatizada frente a una computadora, podría estar por desaparecer.